La Pedagogía Waldorf se fundamenta por tres
grandes rasgos como es l IMPORTANCIA DEL
MOVIMIENTO EN EL NIÑO, COMO APRENDE LA ESCRITURA y como SE ESTUDIAN LAS MATEMÁTICAS .
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Foto extraída de google |
La importancia de la
plena formación de las facultades sensoriomotrices para ulterior desarrollo del
niño, para la adquisición de las técnicas culturales como leer, escribir y
calcular, así como para todos los procesos cognitivos en cursos escolares superiores,
es una afirmación confirmada por los resultados de la moderna investigación
cerebral.
En la escuela Waldorf
puede empezarse la clase con un ejercicio práctico en el que los niños y niñas
empiezan moviéndose; por ejemplo, saltar, patalear, correr y dar palmadas, para
fortalecer, mediante los ejercicios respectivos, la habilidad de las manos y
pies, la coordinación de los miembros y la consciencia sensomotriz. Junto a la
asignatura de gimnasia, las acciones comunitarias de la clase que se realizan
como remover la tierra en el jardín o en el huerto, amasar y cocer el pan,...
ofrecen numerosas oportunidades para mejorar la motricidad gruesa y fina.
En la escuela Waldorf
tiene una especial importancia la asignatura de euritmia que abarca del primero
al último curso. La euritmia fue creada por R. Steiner como un nuevo arte del
movimiento donde se trata de transformar la música y el lenguaje en sus
respectivos gestos y secuencias de movimiento. La euritmia empezó siendo creada
como arte escénico en el que el lenguaje y la música se hacen visibles en el
espacio por medio del cuerpo humano en movimiento. Más tarde, se introdujo en
clase como una asignatura pedagógica de soporte porque en la euritmia, siempre
ha de armonizarse la facultad del movimiento corporal con las capacidades
sensitiva y mental.
El aprendizaje de la
escritura en la pedagogía Waldorf Se implanta desde el primer curso de la escuela primaria se
introducen la letras del alfabeto, no sólo mediante la introducción del signo
gráfico y llamando la atención a cómo hay que pronunciarlo, sin El aprendizaje
de la escritura en la pedagogía Waldorf Se implanta desde el primer curso de la escuela primaria se
introducen la letras del alfabeto, no sólo mediante la introducción del signo
gráfico y llamando la atención a cómo hay que pronunciarlo, sino relatando una
historia en la que cada niño se sumerge inmediatamente con sus fuerzas de
imaginación y representación, incluso si ya sabe leer. Posteriormente, se
dibuja en la pizarra una situación extraída del relato, los niños la dibujan en
sus cuadernos, y desde esa imagen se va destacando con algunos trazos
resaltados el signo gáfico de la letra que se pretende introducir. Por ejemplo,
una montaña para la "M", una serpiente para la "S" y así
sucesivamente con todas las letras del alfabeto.
Más adelante, el signo gráfico será utilizado fuera del contexto de aquel
dibujo, es decir, de una manera abstracta, pero los niños tendrán entonces una
relación anímico-emotiva con esa forma que les sigue siendo ajena y de ese modo
experimentan intensamente la coherencia. Se formula de esta manera la
transición de la imagen al signo gráfica.
El procedimiento del aprendizaje de la escritura anteriormente descrito se
fundamenta en el principio de que los niños no sólo deben aprender a hacer las
cosas sin que también deban entenderlas.
Ó relatando una
historia en la que cada niño se sumerge inmediatamente con sus fuerzas de
imaginación y representación, incluso si ya sabe leer. Posteriormente, se
dibuja en la pizarra una situación extraída del relato, los niños la dibujan en
sus cuadernos, y desde esa imagen se va destacando con algunos trazos
resaltados el signo gráfico de la letra que se pretende introducir. Por
ejemplo, una montaña para la "M", una serpiente para la "S"
y así sucesivamente con todas las letras del alfabeto.
Más adelante, el signo gráfico será utilizado fuera del contexto de aquel
dibujo, es decir, de una manera abstracta, pero los niños tendrán entonces una
relación anímico-emotiva con esa forma que les sigue siendo ajena y de ese modo
experimentan intensamente la coherencia. Se formula de esta manera la
transición de la imagen al signo gráfica.
El procedimiento del aprendizaje de la escritura anteriormente descrito se
fundamenta en el principio de que los niños no sólo deben aprender a hacer las
cosas sino que también deben entenderlas.
En
los primeros pasos del área de matemáticas, las secuencias numéricas y
posteriormente, las tablas de multiplicar, se aprenden mediante procesos de
movimiento articulados rítmicamente, no enunciando simplemente los numerales o escribiendo
sus grafismos respectivos. La secuencia de los números va acompañada de
palmadas, recorridos y saltos realizados colectivamente en variaciones diarias
siempre nuevas y con ello se incorporan a la memoria.
El camino prosigue hacia el aprendizaje de las tablas de multiplicar, haciendo
que, al contar todos juntos en voz alta, destaquen por ejemplo cada segunda o
tercera cifra (2,4,6,5,10 o 3,6,9,12,15) dejando de dar la palmada con cada
número cuando se llegue a esas cifras, o dando sólo la palmada al llegar a
ellas. Eso hace que el niño esté muy atento y coordine la cabeza con las manos.
Así, con actividad corporal y sensomotriz, el niño conquista las tablas de
multiplicar y prepara el camino para posteriormente, realizar las operaciones
de cálculo mental.
Otro peculiaridad del método waldorf, es que las cuatro operaciones deben ser
introducidas en el primer año de la escuela primaria y ejercitadas
simultáneamente.